in silver underwear,
Claude Rains was The Invisible Man…
Por el tema y por como está tratada, debería decir que ésta es una película de terror. Ahora, tiene tantos momentos que incitan a la risa que no sé yo si debería catalogarla como tal. Y no hablo ya de que los efectos especiales o la trama sean la causa de ello, sino que creo que consciente y directamente se intenta la sonrisa o la carcajada directamente en el espectador.
El argumento creo yo que lo podemos imaginar aunque no hayamos visto ninguna de las reversiones (la de Vincent Price, la de Daryl Hanna o la de Kevin Bacon por citar alguna): un científico consigue desarrollar una fórmula para la invisibilidad y poco a poco se da cuenta del poder que esto le confiere y decide usarlo para dominar el mundo (bueno, más o menos).
Sobre actores puedo decir que aquí hace su debut cinematográfico Claude Rains (Casablanca, Lawrence de Arabia) y, aunque hay que reconocer que no lo hace del todo mal, aunque supongo que dará bastante más juego en versión original, que verle envuelto en vendas o directamente invisible (es un decir), poca información nos da de sus aptitudes escénicas al no verle el pelo (textualmente) hasta la escena final. La chica es Gloria Stuart. El caso es que yo me preguntaba que porqué me sonaba tanto este nombre si las películas de la época en las que intervino apenas me sonaban. Pues resulta que es la abuela de Titanic (que t'ha paregut, morrut?). Eso sí, la que regenta el hostal, resulta la monda por lo exagerada que resulta.
Pues mi valoración es que, a ver, obviando que es una peli antigua (1933), no se sale ni por un superargumento ni por una superinterpretación. Supongo que para la época sería todo un reto de efectos especiales y una temática muy de moda (Frankenstein, Drácula), pero para verla hoy quizá le falta un poco de nosequé. Eso sí, hay escenas que resultan muy divertidas.
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