Para empezar a hablar de la discografía de Fangoria digo yo que habrá que empezar por el principio, no? Pues habrá que ser un poco consecuentes y empezar por la maqueta (de la que, por supuesto, no he encontrado ni imagen ni leches, claro).
Allá por el 89, año en que sacaron el último disco de Alaska y Dinarama, concretamente la noche de Halloween, Fangoria puso su primer pie en el mundo con este EP de cuatro canciones, las cuales serán versionadas (y corregidas y aumentadas) posteriormente en caras B, duetos y tal. Como sonar, suena todo un poco cutre (es una maqueta, qué esperas?), bastante guitarrero y algo oscuro. Quizás un poco más de lo que cabría esperar escuchandoalgunas canciones de Fan Fatal o Salto Mortal (su primer LP). Intencionado o casual, es lo que es. Por otra parte, ya podemos ver algunas cosas que más tarde machacará más. Pero vayamos por partes que como solo son 4, podemos pormenorizar:
1- Me comeré tu piel, me beberé tu sangre (canción que se incluirá definitivamente en Salto Mortal). Letra completamente sorprendente y gamberra que me parece de las mejores de la época y que veo como claro homenaje a la revista un tanto freak y gore de donde tomaron su nombre. Musicalmente sigue la línea guitarrera de sus años mozos con algún punto electrónico. En la versión definitiva limpiarán bastante bases y línea (y casi que mejor).
2- La vida sigue. Un rollo bastante poppy (con esos arreglos tipo violín y trompeteros al más puro estilo Ni tú ni nadie, por ejemplo) y una letra que ya augura los futuros temás tragico-amorosos que les caracterizarán más tarde. Aparecerá una versión remixeada más cuidada en el maxisingle de En mi prisión
3- Perdiendo el tiempo. Una de las letras que más me encantan y toda una oda a la pereza (que mira que me gusta cuando se ponen a hablar de temas raros, oye). El rollito musical recuerda bastante a El Rey del Glam. Más tarde sacarán una revisión bastante más lipia y con bases de Depeche Mode que me parece genial.
4- Rascayú. Aquí vemos lo que les interesaba ya por entonces versionar canciones ajenas de una forma bastante personal. Es una canción con quizás demasiados momentos de guitarreo para lo que és. La versión con Paco Clavel mejora un poco, aunque he de reconocer que no es de mis preferidas.
Allá por el 89, año en que sacaron el último disco de Alaska y Dinarama, concretamente la noche de Halloween, Fangoria puso su primer pie en el mundo con este EP de cuatro canciones, las cuales serán versionadas (y corregidas y aumentadas) posteriormente en caras B, duetos y tal. Como sonar, suena todo un poco cutre (es una maqueta, qué esperas?), bastante guitarrero y algo oscuro. Quizás un poco más de lo que cabría esperar escuchandoalgunas canciones de Fan Fatal o Salto Mortal (su primer LP). Intencionado o casual, es lo que es. Por otra parte, ya podemos ver algunas cosas que más tarde machacará más. Pero vayamos por partes que como solo son 4, podemos pormenorizar:
1- Me comeré tu piel, me beberé tu sangre (canción que se incluirá definitivamente en Salto Mortal). Letra completamente sorprendente y gamberra que me parece de las mejores de la época y que veo como claro homenaje a la revista un tanto freak y gore de donde tomaron su nombre. Musicalmente sigue la línea guitarrera de sus años mozos con algún punto electrónico. En la versión definitiva limpiarán bastante bases y línea (y casi que mejor).
2- La vida sigue. Un rollo bastante poppy (con esos arreglos tipo violín y trompeteros al más puro estilo Ni tú ni nadie, por ejemplo) y una letra que ya augura los futuros temás tragico-amorosos que les caracterizarán más tarde. Aparecerá una versión remixeada más cuidada en el maxisingle de En mi prisión
3- Perdiendo el tiempo. Una de las letras que más me encantan y toda una oda a la pereza (que mira que me gusta cuando se ponen a hablar de temas raros, oye). El rollito musical recuerda bastante a El Rey del Glam. Más tarde sacarán una revisión bastante más lipia y con bases de Depeche Mode que me parece genial.
4- Rascayú. Aquí vemos lo que les interesaba ya por entonces versionar canciones ajenas de una forma bastante personal. Es una canción con quizás demasiados momentos de guitarreo para lo que és. La versión con Paco Clavel mejora un poco, aunque he de reconocer que no es de mis preferidas.
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